martes, 29 de noviembre de 2016

Puedes esperar que Dios responda a tus oraciones.


¿Cuántas veces nos hemos preguntado porque Dios aún no responde mi oración?  

Para que nuestras oraciones sean contestadas nuestro Padre nos dice que pidamos y se nos dará, que busquemos y hallaremos, y que  llamemos y se nos abrirá (Mateo 7:7).  También nos dice que todo lo que pidiéramos en oración creyendo, lo recibiremos (Mateo 21:22)  pero hay un versiculo muy importante que creo es la clave para que nuestras oraciones sean contestadas.

Si ustedes permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pueden pedir lo que quieran, ¡y les será concedido!  (Juan 15:7) NVI


Pero qué es "permanecer en mi", es la primera condición, y  significa que estemos cerca de nuestro Señor Jesucristo, que le obedezcamos, que tengamos una relación profunda con Él, que no solo vayamos a la iglesia y saliendo de la iglesia se nos olvide que Él está con nosotros en todo momento y que desde que tomamos la decisión de seguir a Cristo nos convertimos en sus siervos y debemos tener constancia en nuestra FE, en nuestra obediencia, en hacer todo lo que hacemos pensando que Él está con nosotros y que si a Él no le gusta no debes hacerlo, en que antes de hacer algún proyecto debes pedirle dirección.  En que nacimos para servirle.


y "mis palabras permanecen en ustedes"  esta es otra condición.   Dios quiere que le conozcamos, para eso envió a su hijo Jesucristo, para que a través de Él pudiéramos saber lo que Dios quiere, en la Biblia está escrita su palabra, palabra que llegó a nosotros a través de su hijo.  Entonces si queremos conocerlo, y que sus palabras permanezcan en nosotros debemos leer la Biblia, comprenderla y obedecerla. Si obedecemos Su palabra significa que hemos leído la Biblia y hemos interpretado lo que leímos y lo obedecemos. Recuerda que Jesús murió y es nuestro Salvador. Ahora le pertenecemos, nos compro con su sangre debemos servirle.

Cuando en nuestra vida haya un cambio de intenciones a hechos, cuando realmente en nuestro corazón crezca la llama del querer saber mas de Dios y de nuestro Señor Jesucristo para conocer Su palabra, para conocer Sus deseos y ponerlos por hechos,  podremos experimentar realmente la experiencia de que nuestras oraciones sean contestadas.  Podremos ver cómo el Poder de Dios se manifiesta en nuestras vidas.

Cuando nuestras oraciones no son contestadas con la velocidad que quisiéramos, en vez de reclamar a nuestro Padre, deberíamos reflexionar qué está pasando en nuestra vida, que hemos dejado de hacer, en verdad estoy llevando una vida de acuerdo a como Dios quiere, reacciono ante las situaciones que experimentó en la vida cotidiana como un Cristiano o como una persona que no conoce a Jesús ni a Dios.

Dios nos ama y Él sabe nuestras necesidades y aflicciones antes de que nosotros se las platiquemos, pero Él también quiere que en nuestra vida haya un cambio, que no solo queramos recibir y recibir, sino que también ofrezcamos nuestro propio andar, nuestras acciones al servicio del nuestro Señor Jesucristo y de Dios nuestro Padre.